En la foto se aprecian
unos círculos concéntricos sobre la superficie del agua que
corresponden a las ondas transversales creadas por una
piedra al caer a la fuente. La forma de la superficie del
agua podría representarse matemáticamente por una sinuoide
de dos dimensiones (incluso incluir la multiplicación por
una exponencial para incluir la atenuación de la onda)